domingo, 22 de junio de 2014

La importancia de la apariencia: Let Me In

Una de las ventajas de tener una familia multicultural es el poder empaparte de lo mejor de cada una de las culturas, por lo que hablamos muchísimo de lo mejor y peor de cada una. Uno de los temas recurrentes en nuestras conversaciones es la apariencia.
Que la apariencia es algo importante en muchos aspectos de nuestra vida es algo indiscutible, lo podremos tachar de más o menos hipócrita, pero no lo podemos negar. Juzgar a la gente por su apariencia ya es algo diferente y de palabras mayores.
En Corea, la apariencia es lo que prima siempre en su manera de vivir. No sólo la apariencia física, sino todo en su vida es un constante “quiero y no puedo” o un “puedo mucho más que tú”, lo que implica una constante presión social desde que son niños. A saber; hay que estudiar muchísimo para entrar en la mejor universidad para poder encontrar un buen trabajo, ganar un buen sueldo y así poder casarte con la chica más guapa, que seguramente lo sea porque se haya hecho la cirugía de arriba a abajo, tener el mejor coche, vivir en el mejor barrio, o ser la mejor de tu promoción en una de las mejores universidades de Corea y no conseguir un trabajo a tu altura porque no cumples con sus cánones de belleza, etc. Sé que es un poco generalizar, pero realmente la vida de los coreanos no difiere mucho esto.
Hace poco varios amigos muy cercanos de GukNam han sido papás. Sus mujeres, como viene siendo costumbre desde hace unos años, han pasado un par de semanas en lo que allí llaman “centros de recuperación post parto”, que son como unas residencia-hospital en el que las mujeres pasan allí unas 2 o 3 semanas por el módico precio de unos 2.000€. Creo que aquí en España a nadie se le ocurriría porque, y no creo que esto lo piense sólo yo, donde mejor nos sentimos es en casa. Vamos, que no se me ocurre gastarme 2.000€ para estar encerrada entre cuatro paredes cuando podría estar haciendo lo mismo tranquilamente en mi casa, y sobretodo, después de dar a luz, que es cuando seguramente más se necesite esa comodidad y calidez que nos da nuestro hogar. Pues en Corea se hace esto por apariencia. No porque la mujer lo necesite, no. Se hace porque cuesta mucho dinero y es una señal de que puedes gastarlo. ¿Y cómo lo se? Porque los amigos de GukNam se han quejado todos de lo mismo. A ninguno les parecía buena idea, incluso a sus mujeres, pero el no ir a este sitio suponía una presión social y un estatus que mantener y, por lo tanto, tenían que hacerlo.
En ese aspecto, GukNam es muy consciente de lo que ha ganado en tolerancia desde que vive aquí. De hecho, él siempre ha sido un poco rebelde, aunque le da cierta importancia a la apariencia (le gusta arreglarse) está totalmente en contra de la cirugía estética gratuita (no por gratis, sino por común debido a la presión social), algo demasiado arraigado culturalmente en su país.
Sobre la gran presión social que impone una buena apariencia y que exige en muchos casos el paso por el bisturí, tenemos nuestras propias opiniones respecto a un programa que lleva emitiéndose desde 2011 y que toca todos estos temas: Let Me In (Let 美人).
Let Me In es un programa de televisión que se emite en el canal de pago “Story On”, propiedad del gran conglomerado CJ Entertainment. El título es un juego de palabras entre el inglés y la lectura coreana de los carácteres chinos (me /mi/) belleza, y (in) persona. El programa trata básicamente de hacer un cambio radical mediante cirugía estética a los candidatos que han pasado previamente un proceso de selección y que son elegidos por los cirujanos de las diferentes clínicas que participan en el programa. Estas clínicas realizan las operaciones de forma gratuita a cambio de publicidad directa.
No se si habréis estado alguna vez en Corea pero allí la publicidad sobre cirugía estética está totalmente prohibida en la televisión, en cambio se permite la emisión de este tipo de programas, y lugares como el metro, o cualquier sitio que permita un cartel, están infestados de publicidad de este tipo.
Let Me In ha generado mucha controversia desde que empezó a emitirse. Los que lo critican afirman que degrada la dignidad de la sociedad coreana hasta el narcisismo y la vanidad y que anima a la gente a pasar por procedimientos innecesarios y peligrosos. En cambio, los que están a favor lo ven como una forma de caridad para ayudar a las personas a superar las barreras estéticas ajenas a su voluntad para lograr una mejor calidad de vida.

La barrera estética supone una carga social muy fuerte que puede llegar a impedir a una persona tener una vida completamente normal por lo que entiendo que muchas personas vean la cirugía no como un capricho por verse más guapos, sino como una necesidad para poder tener una vida normal, y esto ¿es culpa de este tipo de programas? ¿crea Let Me In esta necesidad? La respuesta en NO. Es un problema muy arraigado en la sociedad coreana, y los que están en contra de este programa lo están porque no les gusta este aspecto de la sociedad, pero el problema no se soluciona con dejar de emitir el programa, se soluciona cambiando la actitud, y eso es más complicado, sobretodo en un país donde lo que los otros piensen de ti siempre importa más que lo que tú pienses de ti mismo.

Os dejo un enlace al programa de Let Me In de esta misma semana, no lleva subtitulos, pero creo que no se necesitan, y espero vuestras opiniones al respecto, que siempre son bienvenidas :).

martes, 25 de marzo de 2014

Gastronomía multicultural

O como comer de todo en casa, felizmente, y sin morir en el intento.
Uno de los principales problemas que nos encontramos cuando formamos parte de una familia multicultural es el de la alimentación. Seguramente muchos piensen que esto además de ser un problema es una ventaja, y les doy toda la razón, pero siempre es primero un problema.
¿Cuántos han vivido en el extranjero y han echado de menos la comida de su tierra? Supongo siempre que la añoranza será mayor o menor en la medida que la comida local se parezca a la nuestra, y en lo fácil que nos resulte encontrar los ingredientes con los que nosotros podríamos cocinar nuestra propia comida.
En nuestro caso, es muchísimo más fácil para GukNam vivir en España que para mi vivir en Corea, y eso que a mí me encanta la comida coreana y a GukNam menos la española de lo que a mi me gusta la coreana. ¿Por qué? Pues estas son nuestras razones.
En Corea es muy barato comer fuera de casa y hay restaurantes de todo tipo de comidas. Sobre todo si los restaurantes son coreanos son mucho más baratos que si salimos a comer comida occidental. Por el contrario, alimentos como la carne, las verduras y la fruta son relativamente caros. Son relativamente caros porque dependiendo de donde se compren pueden ser sólo un poco a muy caros. La verdura, incluso comprando en los lugares más baratos, es un poco más cara que en España. Pero la carne y la fruta son asquerosamente caros. En España pasa totalmente lo contrario, comer fuera de casa es un sable para la economía familiar y, al menos donde vivo, comprar carne, frutas y verduras es relativamente barato, y más comparándolo con lo que cuesta en Corea.
Con esto no quiero decir que a los coreanos les resulta caro cocinar en casa, no, porque para ellos y su nivel de vida es barato. Lo caro es querer comer en casa en Corea como un español (y en restaurante español ya ni te digo). Pongamos un ejemplo… comer macedonia de frutas en Corea.
Vivo en Valencia y tengo la suerte de que me den naranjas, y aún si las tuviese que comprar, aquí son baratas. Lo digo porque un postre que me encanta sobre todo en esta época que hay fresas (o fresones), es una macedonia de fresas, plátano y zumo de naranja. El otro día compré 2kg de fresones por 3€, los plátanos a 1,50€/kg y las naranjas sin coste. En Corea hice el mismo postre sólo un par de días porque una bandeja de fresas de 250gr costaba 8000 won (5,33€), los plátanos venían a costar lo mismo que en España, y las naranjas 8000 won/kg. Y eso que no eran naranjas de Valencia ;). La diferencia de precios es abismal… ¡como para intentar comer las 5 piezas de fruta diarias!
Ahora pongamos el ejemplo al revés; comer samgyeopsal en España.
El samgyeopsal es una comida en la que el principal ingrediente es la panceta de cerdo a la parrilla y se come envolviendo en una hoja de lechuga un poco de arroz, unos trocitos de panceta mojados en aceite de sésamo, ssamjang y otras verduras a la parrilla como kimchi, champiñones, ajo, etc.
En Corea compramos panceta de cerdo para comer samgyeopsal en casa (éramos estudiantes y no nos podíamos permitir comer en restaurantes a menudo). Tengo grabado a fuego en mi mente el momento “ver precio” del paquetito de 300gr de panceta en el e-mart cerca de casa. Decir a su favor que estaba recién cortada en la sección de carnicería y no era de las que vienen de fábrica en bandeja, al vacío o congelada. 15000 won, o sea 10€ por 300gr de panceta (era 2 veces más de la ración que te sirven en restaurante por el mismo precio, pero aún es una pasada!). En cambio, en España comemos samgyeopsal muy a menudo, el precio de la panceta es de 7€/kg. Panceta de cerdo fresca y recién cortada en la carnicería de barrio.
Con la salvedad de que en Corea podemos encontrar muchísimas más clases de hojas verdes para envolver el samgyeopsal, en España sigue siendo muchísimo más barato comer este plato coreano.
Y así, en general, es muchísimo más económico comer cualquier comida en casa, ya sea coreana o española, en España que en Corea. Yo lo pasaba muy mal en Corea. Sin malentendidos. ¡Me encanta la comida coreana! Pero cada cierto tiempo mi cuerpo me pedía desintoxicarme y no había manera de hacerlo decentemente. En cambio aquí, GukNam aún no deja de sorprenderse de lo fácil que es poder cocinar sus platos favoritos sin problemas cada vez que le apetece. Tanto que llevamos prácticamente una dieta de 50-50, 50 mediterránea 50 coreana. De las dos comidas grandes del día normalmente suelen ser una coreana y una española. Ésto en Corea era impensable para nosotros, a no ser que estés montado en el $, y como no tenemos esa suerte pues…

La única y pequeña pega que le pongo es que algunos ingredientes (por suerte son muy pocos) son difíciles de encontrar, por lo que hay que buscar sustitutos, y sobre todo aprender a cocinar, ¡pero estamos en ello! Y ya hemos perfeccionado un par de recetas que me encantará compartir por aquí :).

viernes, 14 de marzo de 2014

White Day

Hoy en Corea (y también en Japón) se celebra el White Day y como manda la tradición, he recibido mi regalito :).
El White Day se celebra cada 14 de marzo y consiste en que las chicas que dieron regalos o chocolate por San Valentín, el 14 de febrero, reciben regalos y caramelos de las personas a quienes regalaron.
En Corea no se hacen grandes regalos en San Valentín. Normalmente consisten en pequeños detalles y sobretodo chocolate, que se regala a nuestros maridos, novios, padres, hermanos e incluso a nuestros amigos y compañeros de trabajo. Depende de lo entregada  que sea o lo que
le guste celebrar  a la persona ese día dará chocolates a muchos o a nadie. A cambio el 14 de marzo, un mes después, los que recibieron chocolate, generalmente los chicos, devuelven por cortesía el regalo en forma de caramelos o algún detalle. Obviamente, en el país de la ostentosidad, no faltan las parejas que se regalan perfumes carísimos y bolsos de diseñador, aunque no es
lo habitual.


Nosotros sin pretenderlo siempre lo celebramos. Normalmente por San Valentin siempre le doy a GukNam chocolatinas y le compro alguna tontería que sé que le pueda gustar. Nada ostentoso pero que cumple con la función del detalle, y él, cada White Day me compra chuches con algún detallito. De hecho, él se lo curra muchísimo más que yo. Tanto que cada año se inventa una milonga para sorprenderme cuando creo que me voy a quedar sin regalo. ¿Se puede ser más amor?

PD: Me encanta esta foto hecha con mi lomo. Me salen montadas sin saber como. El día que pretenda hacer alguna así a propósito no me saldrá.

sábado, 22 de febrero de 2014

Con correos nos hemos topado

Quien haya permanecido una temporada fuera de las fronteras o haya tenido a alguien en esa situación se las ha tenido que ver con la tan inestimable desayuda de nuestro gran amigo, Correos.
Esto pretende ser una entrada de desahogo totalmente fundamentada, con leyes y reglamente en mano, de como Correos nos  toma el pelo cuando y como quiere.
Desde que nos establecimos en España hemos estado recibiendo, cada cierto tiempo, cajas con cosas que nos envía la familia. Los primeros meses las cajas eran pura y llanamente la vida de GukNam en Corea. Su ropa, sus libros, sus útiles y aparatejos, etc. Las dos últimas cajas han sido ya una mezcla de cosas de GukNam y cosas que nos ha enviado la familia; detalles, snacks, regalitos. Nada del otro mundo que no hagan las familias que viven separadas. Pues bien, con todo, hemos tenido que pagar 3 veces (la mitad de las cajas recibidas) IVA y despacho aduanero. La primera vez lo pagamos, la segunda vez ya me enfadé muchísimo y reclamé, pasaron de mi. La tercera vez ha sido la gota que ha colmado el vaso.
Este lunes pasado recibimos la última caja hasta la fecha que nos había enviado mi cuñada. Unos pocos snacks, un regalito para mi y un par de cosas para GukNam. Tengo que decir que era una caja enorme para lo que contenía, pero Mikyung es así, caballo grande ande o no ande. Pues bien, esta caja llegó en un estado lamentable y no me pensé dos veces en quejarme abiertamente por twitter por ello.
La caja era un envío EMS, aquí también se le conoce como Postal Exprés. El EMS es el envío más caro y seguro que ofrece cualquier servicio de correos de cualquier país. En España además, es excesiva y exageradamente caro. Teniendo eso en cuenta, así me llegó la caja:

Vergonzoso, ¿verdad? Pues para acabar de arreglarlo, me llegó con regalito. El sello rojo de Correos que se puede ver es porque venía con cargo de aduanas que me tocó pagar para poder llevarme la caja, y de gratis, el cabreo.
No pude evitar desahogarme por twitter y, a consecuencia de un RT de CocolaCoquette en el que mencionó a Correos, esto es lo que aconteció:

Sobre la conversación, vamos a explicar punto por punto y por qué pienso que Correos nos toma el pelo y nos  cobra con malas artes por la gestión que realiza.
A grandes rasgos, hay que aclarar que cualquier importación está sujeta a los impuestos aduaneros que se precien, dependiendo del país de procedencia, IVA y aranceles. PERO, no todos los envíos procedentes del extranjero son importaciones, aunque en la legislación se utilice este concepto, ya que esta definición implica un propósito comercial. Por eso,  la legislación actual contempla unos casos de excepciones por los que ciertos envíos procedentes del extranjero están exentos.
En nuestro caso, el Capítulo III de la Ley 37/1992, de 28 de diciembre, del Impuesto sobre el Valor Añadido, habla de las importaciones de bienes que se consideran exentas y, más concretamente el artículo  28, importaciones de bienes personales por traslado de residencia habitual, que era el caso de GukNam y el artículo 36, importaciones de pequeños envíos.
Artículo 28. Importaciones de bienes personales por traslado de residencia habitual. 
Uno. Estarán exentas del Impuesto las importaciones de bienes personales pertenecientes a personas físicas que trasladen su residencia habitual desde un territorio tercero al Reino de España. 
Dos. La exención quedará condicionada a la concurrencia de los siguientes requisitos: 
1.º Los interesados deberán haber tenido su residencia habitual fuera de la Comunidad al menos durante los doce meses consecutivos anteriores al traslado. 
2.º Los bienes importados habrán de destinarse en la nueva residencia a los mismos usos o finalidades que en la anterior. 
3.º Que los bienes hubiesen sido adquiridos o importados en las condiciones normales de tributación en el país de origen o procedencia y no se hubieran beneficiado de ninguna exención o devolución de las cuotas devengadas con ocasión de su salida de dicho país.Se considerará cumplido este requisito cuando los bienes se hubiesen adquirido o importado al amparo de las exenciones establecidas en los regímenes diplomático o consular en favor de los miembros de los organismos internacionales reconocidos y con sede en el Estado de origen, con los límites y condiciones fijados por los Convenios internacionales por los que se crean dichos organismos o por los Acuerdos de sede. 
4.º Que los bienes objeto de importación hubiesen estado en posesión del interesado o, tratándose de bienes no consumibles, hubiesen sido utilizados por él en su antigua residencia durante un período mínimo de seis meses antes de haber abandonado dicha residencia.No obstante, cuando se trate de vehículos provistos de motor mecánico para circular por carretera, sus remolques, caravanas de cámping, viviendas transportables, embarcaciones de recreo y aviones de turismo, que se hubiesen adquirido o importado al amparo de las exenciones a que se refiere el segundo párrafo del número 3.º anterior, el período de utilización descrito en el párrafo precedente habrá de ser superior a doce meses.No se exigirá el cumplimiento de los plazos establecidos en este número, en los casos excepcionales en que se admita por la legislación aduanera a efectos de los derechos de importación. 
5.º Que la importación de los bienes se realice en el plazo máximo de doce meses a partir de la fecha del traslado de residencia al territorio de aplicación del impuesto.No obstante, los bienes personales podrán importarse antes del traslado, previo compromiso del interesado de establecer su nueva residencia antes de los seis meses siguientes a la importación, pudiendo exigirse garantía en cumplimiento de dicho compromiso.En el supuesto a que se refiere el párrafo anterior, los plazos establecidos en el número anterior se calcularán con referencia a la fecha de la importación. 
6.º Que los bienes importados con exención no sean transmitidos, cedidos o arrendados durante el plazo de doce meses posteriores a la importación, salvo causa justificada.El incumplimiento de este requisito determinará la exacción del impuesto referido a la fecha en que se produjera dicho incumplimiento.
Artículo 36. Importaciones de pequeños envíos. 
Uno. Estarán exentas del Impuesto sobre el Valor Añadido las importaciones de pequeños envíos, procedentes de países terceros, que no constituyan una expedición comercial y se remitan por un particular con destino a otro particular que se encuentre en territorio de aplicación del impuesto. 
Dos. A estos efectos, se considerarán pequeños envíos sin carácter comercial aquellos en los que concurran los siguientes requisitos: 
1.º Que se importen ocasionalmente. 
2.º Que comprendan exclusivamente bienes de uso personal del destinatario o de su familia y que, por su naturaleza o cantidad, no pueda presumirse su afectación a una actividad empresarial o profesional. 
3.º Que se envíen por el remitente a título gratuito. 
4.º Que el valor global de los bienes importados no exceda de 45 euros.
Hasta el año pasado, la información del artículo 36 se podía encontrar resumida a grandes rasgos en el apartado de información sobre aduanas en la web de Correos, información que ha desaparecido por obra y arte de magia y en ese apartado es en el que ahora encontramos la información de Tramitación aduanera en envíos de importación, el enlace que me facilita la cuenta de twitter de Correos en la conversación.
En este enlace encontramos las opciones para tramitar el despacho de un paquete cuando aduanas nos lo retiene. Porque puede que el paquete sea susceptible de exención, pero es una lotería y aduana lo puede retener. En este caso Correos, que es quien en un principio se ocupa de hacer el despacho, te informa de que utiliza dos métodos; el simplificado, en el que avisa que hará la tramitación aduanera de cualquier paquete que sea un envío entre particulares y tenga un valor inferior de 150€, y el método ordinario, para paquetería comercial y envíos entre particulares de más de 150€, dónde te avisan por carta que tu paquete está retenido en aduanas y te dan 3 opciones, o buscas un agente para que te haga la tramitación y lo libere, lo haces tú mismo, o lo contratas con ellos.
Hasta el año pasado correos había utilizado para cualquier envío el método ordinario sea cual fuere el valor declarado en la caja o paquete. Llegaba una carta certificada en la que te decían que el paquete estaba retenido. Si el envío era comercial autorizabas a correos o a un tercero a realizar la gestión enviando la documentación necesaria (factura de compra, etc), y si era un envío personal entre particulares, solamente se necesitaba enviar por fax o correo electrónico una declaración jurada sobre el contenido del paquete y te liberaban el paquete sin coste alguno.
¿Por qué Correos ha cambiado su sistema? Correos ya no es pública. Mal que nos pese, ahora es una empresa privada que ejerce un monopolio en el sector de la correspondencia privada. Y como toda empresa privada sólo tiene un objetivo: obtener beneficios.
Al permitir tener la opción a los usuarios de liberar los paquetes retenidos que estaban exentos sin coste alguno parece ser que Correos pierde dinero. Realmente no es así, porque esos trámites forman parte del envío que se paga bien pagado en origen y Correos no debería contar esto como un coste adicional. PERO, ¿que pasa si se externaliza esa sección? Pues eso es lo que ha hecho Correos, externalizar el trámite aduanero, como si nuestro paquete, cuando entra en aduanas se fuera a marte y volviese y te quisieran cobrar por eso. Pues así es, y por esa razón desde 2013 cambiaron las opciones de tramitación aduanera y, cualquier paquete que retenga aduanas, aunque esté exento de pagar el impuesto, como a Correos no le importa, hará el despacho, te cobrará el IVA con el que la Agencia Tributaria estará más que contenta y además te sacarán casi 20€ por el despacho que te han hecho de un paquete que tendría que haber pasado de largo.
Por eso, cuando la cuenta de Correos en twitter me dice que “aduanas considera que este envío es una transacción comercial, aunque se trate de un envío entre particulares” ni me molesto en contestar. Sí, lo que dice es verdad, pero no es verdad. Que considere en primera instancia que sea un envío comercial no quiere decir que lo sea. Como decía antes, es una lotería y los agentes de aduanas pueden equivocarse , o simplemente retenerlo por dudas, y de esas dudas son de las que se aprovecha correos para sacar tajada y sin darnos opción a demostrar que es un envío exento.
Se puede ver en el Título II de franquicias de derechos de importación del Reglamento (CE) nº 1186/2009 del Consejo, de 16 de noviembre de 2009, relativo al establecimiento de un régimen comunitario de franquicias aduaneras, que se complementa con la legislación del IVA, y por el que aduanas mantiene los supuestos de exención de los envíos entre particulares. El Capítulo I corresponde al artículo 28 de la Ley del IVA y el Capítulo VI al artículo 36.
Si con todo, tenemos toda la razón del mundo y nuestro envío es exento, haciendo una reclamación a la Agencia Triburaria por ingresos indebidos tan sólo obtendremos la devolución del impuesto pagado. En mi caso no es ni la 1/3 parte de lo que pagué a Correos, pues como tenía muy claro que los envíos entre particulares inferiores a 45€ están exentos, nuestra familia, cuando nos ha enviado algo, siempre ha puesto como valor unos $50, que vienen a ser 35-40€, para intentar evitar trámites innecesarios (y porque es totalmente obligatorio declarar un valor). El pago restante, equivalente al despacho que realiza Correos en aduanas de tu paquete no te lo devuelve nadie.
Hay que decir que a la Agencia Tributaria le conviene muchísimo esto. La mayoría de gente no sabe que se puede pedir la devolución del impuesto, así que mientras Correos se enriquece haciendo despachos fraudulentamente, la Agencia Tributaria consigue ingresar un dinerillo extra en impuestos. Como dicen en mi tierra, compte redó!
Respecto al estado del paquete. Estoy esperando a que me digan algo desde Corea, porque viendo la eficacia de Correos España, dudo que me solucionen algo. Desde luego, sólo hay que ver el registro al que someten los paquetes en Corea comparado con el de España, y si no, para muestra un botón:


Siento indignación máxima por como trata Correos los envíos carísimos y por como tratan a los usuarios. ¿Habéis probado a llamar a atención al cliente? Siempre a través de un robot y nunca darán ninguna información que no esté en la web y, si no nos queda otra que poner una reclamación, tal y como nos animaban nuestros amigos de Correos por twitter, no tenemos otra opción que rellenar un formulario que enviaremos, tal y como hice la segunda vez que nos cobraron las aduanas. Y sí, nos contestarán, pero para darnos cuenta de que se han pasado la reclamación por sus partes más indignas. Porque no tenemos la opción de dirigirnos a nadie personalmente, las quejas y reclamaciones quedan en papel mojado y nos hacen sentir totalmente impotentes.
Si has llegado leyendo hasta aquí, ¡gracias! No sé si me habré explicado bien o si al final se me queda algo en el tintero pero desde luego, sólo espero que este desahogo no sirva para que nos metan en ninguna lista negra, porque tal y como están las cosas, no me extrañaría.

sábado, 8 de febrero de 2014

Volver a empezar

Hace unos cuantos años que empecé con mi primer blog y desde entonces he estado enganchada con alguno, con muchos altibajos y estancamientos, pero sin abandonarlo definitivamente.
Empecé con Milk & Cookies. Durante unos meses escribí con mucho entusiasmo pero, al cabo del tiempo y debido a cambios personales decidí dejar de escribir en él. Nunca pensé en cerrarlo porque aunque ahora estoy muy lejos de la persona que empezó ese blog, no quiero olvidar lo que fui y lo que compartí, que al fin y al cabo era y sigo siendo yo.
Al poco de cerrar Milk and Cookies abrí Wonderful Creams, un blog sobre cosmética coreana donde podía escribir más abiertamente sobre los productos que me gustaban. Con el tiempo y la decepción de un proyecto truncado me cansé de escribir en él, me sentía en la obligación de escribir y a mi, todo lo que se convierte en obligación y deja de hacerse por gusto me frena. No descarto actualizarlo alguna vez, pero no lo prometo, a pesar de que se me han quedado un montón de reseñas por hacer.
Al mismo tiempo que empecé con Wonderful Creams también lo hice con La Grenouille aut Château Vert, una especie de embrión de lo que me gustaría que fuese realmente mi blog personal. Apenas escribí porque no tenía muy claro cómo hacerlo, como enfocarlo y ni si tan siquiera me representaba.
Hace unas semanas, dándole vueltas a todo esto, y con las ganas de escribir en mi propio blog todo lo que se me pasa por la cabeza, se lo comenté a mi querida Coco la Coquette y ella me hizo ver la luz. A ella le debo el nombre y todo lo que quiero que sea este blog <3.

Así que vuelvo a empezar con esto del blog personal, con muchas ganas pero a mi ritmo, sin prisa pero sin pausa...